La máscara anti-IA de Ewa Nowak protege a los usuarios de la vigilancia masiva




Publicado el 30 de julio de 2019
Nowak diseñó la máscara de incógnito en un intento por recuperar la privacidad y el anonimato que sienten que se ha perdido con las cámaras de detección de rostros instaladas en espacios públicos.
"Esto tiene un gran valor en forma de mayor seguridad y detección de unidades peligrosas. Por otro lado, ¿en qué dirección se desarrollará la vigilancia de la sociedad?"
Descrito por el diseñador como "joyas de la cara", la estructura principal del accesorio en forma de máscara consiste en una pieza larga de latón que se ha formado para adaptarse a los contornos de la cara, curvando detrás de las orejas como un par de anteojos.
"Las cámaras son capaces de reconocer nuestra edad, estado de ánimo o sexo y hacer coincidir con precisión la base de datos; el concepto de desaparecer entre la multitud deja de existir", continuó.
Hizo uso del sistema de reconocimiento facial de aprendizaje profundo DeepFace del sitio, que identifica con precisión a las personas fotografiadas y le pregunta si desea etiquetarlas.
"Todos los días, cientos de cámaras nos miran, los sistemas de reconocimiento facial se vuelven cada vez más perfectos y el lugar de las especulaciones actuales sobre el futuro está ocupado por tecnología sofisticada y avanzada", dijo el diseñador.
Nowak luego probó el diseño cargando fotos tomadas con la máscara en Facebook.
En un proyecto similar, Katja Trinkwalder y Pia-Marie Stute diseñaron una serie de objetos complementarios, o Accesorios para los paranoicos, que bloquean o impiden la recopilación de información de los usuarios.
Debido al tamaño y la disposición de cada uno de los elementos de la máscara, las características prominentes del rostro humano se ven alteradas, y los algoritmos de reconocimiento facial en las cámaras de vigilancia no están equipados para leerlos correctamente.
Presenta tres elementos prominentes que trabajan juntos para hacer que la cara del usuario sea "irreconocible" para las cámaras. Estos son dos círculos de latón que se encuentran debajo de los ojos del usuario, y un elemento rectangular colocado entre los ojos.
El diseño final fue el inicial que probó Nowak, ya que funcionó por primera vez. En este caso, según el diseñador, "la forma resultó casi por completo de la función de este objeto".
Si bien el objeto es actualmente un concepto, Nowak lo ve como una joya que podría usarse comúnmente en el futuro.
La diseñadora polaca Ewa Nowak ha desarrollado una máscara que hace que la cara del usuario sea indetectable para los algoritmos de reconocimiento facial utilizados en las cámaras de vigilancia pública.
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Sin embargo, además de cumplir con su función, el diseñador quería crear un objeto que también fuera estéticamente agradable y que el usuario disfrutara usar.